Algunas se sorprenderán al saber que es necesario usar un aceite como primer limpiador, sobre todo las que tengan exceso de grasa en la piel. Sin embargo, gracias a él conseguimos llegar a lo más profundo del poro, eliminando toda la suciedad que haya dentro para evitar que se formen los odiosos puntos negros. Por ello, pese a tener la piel grasa no debemos suprimir este paso.
Podemos elegir un aceite especial para desmaquillar o lo que está muy de moda ahora: los bálsamos desmaquillantes. Los dos tienen la misma utilidad y se utilizan sobre la piel seca sin necesidad de utilizar algodón. Puede retirar incluso cosméticos resistentes al agua. No hay aceites específicos para cada tipo de piel. Ejemplo de un bálsamo limpiador es el de Coolmethics, hecho a base de ingredientes naturales.
Después de realizar este paso, seguimos con el limpiador en base acuosa. ¿Qué es?, nuestro limpiador normal, ya sea en pastilla, en gel o en espuma. Deberemos escoger uno acorde a nuestro tipo de piel, ya sea seca, normal, mixta, grasa, sensible... Por ejemplo, este limpiador de Garnier, específico para pieles mixtas.
Esta limpieza hay que seguirla día y noche, pese a que no nos maquillemos. Así eliminaremos el exceso de grasa y sudor y las impurezas o suciedad que puede quedarse en el poro durante el día. Ahora que ya sabemos cómo cuidar nuestra cara al 100% notaremos diferencias y luciremos un rostro bellísimo.
