miércoles. 24.04.2024

La dieta de bambú del panda rojo del BIOPARC de Fuengirola

Desde hace más de un año y medio, el centro de conservación malagueño alberga a Chang y Maggie, una pareja reproductora del que es considerado por algunos como el mamífero más bello del mundo. El bambú conforma más del 90 por ciento de su dieta y es esencial para cubrir sus necesidades nutricionales. La disponibilidad de bambú es un aspecto central de la conservación ‘ex situ’ del panda rojo, haciendo que la búsqueda de proveedores que garanticen esta planta a los parques de animales sea esencial

 PANDA Zoo Fuengirola
PANDA Zoo Fuengirola

La fauna que habita en las selvas tropicales del planeta cuenta con una de las dietas más amplias y variadas del mundo animal. Frutas, hojas, insectos, semillas, frutos secos y otros animales conforman el alimento de especies vegetarianas, carnívoras y omnívoras.

A pesar de esta variedad, hay especies como el panda rojo que, casi exclusivamente, se alimentan de un preciado brote verde: el bambú. Aunque este pequeño mamífero pertenece a la orden de los carnívoros, el 90 por ciento de su dieta está compuesta por esta planta. Se estima que un panda rojo debe ingerir alrededor de un 20 por ciento de su peso corporal en bambú, todos los días. Los pandas rojos están emparentados con todos los carnívoros, pero se adaptaron sorprendentemente a comer bambú, ya que es la planta principal de las zonas donde viven como, por ejemplo, los bosques de Nepal, el norte de Birmania y Hunan y Schuan en China.

En el caso de Chang y Maggie, los ejemplares que viven en centros de conservación como BIOPARC Fuengirola, estas cantidades ascienden a casi medio kilo diario de bambú acompañado con una gran variedad de frutas y complementos. El que estos pequeños mamíferos necesiten estas grandes proporciones de bambú para cubrir sus requerimientos nutricionales, hace que el equipo técnico del parque malagueño esté en continua búsqueda de proveedores que garanticen que los pandas rojos reciban este alimento tan especial.

BIOPARC Fuengirola recibe, cada dos semanas, 6 kilos de bambú recién cortado y seleccionado con las hojas más frescas, procedente de Bambú Parque, un vivero especializado en el cultivo ecológico de esta planta. Esta provisión permite cubrir sus necesidades y garantizar su bienestar.

No es un bambú cualquiera, necesitan las ramas más tiernas y recién brotadas

Los pandas rojos no comen cualquier tipo de bambú. De las 1200 especies que existen, solo comen unas pocas de estas. Y encontrar un suministro regular de estas supone todo un reto para el equipo de BIOPARC.

Recientemente el parque de animales ha iniciado una colaboración con el anteriormente nombrado Bambú Parque con sede en Portugal y considerado el vivero más importante de Europa en el cultivo de cien especies diferentes de bambú. En él, su equipo cultiva algunas variedades originarias de zonas tropicales que son las mas apreciadas por los pandas. Este vivero tan especializado es el lugar idóneo para producir el bambú que día a día necesitan los dos ejemplares que habitan en BIOPARC, ya que se trata de la recolección compuesta de las ramas más tiernas y recién brotadas por la tarde, las empaqueta con cuidado y las envían durante la noche para que lleguen al centro de conservación de Málaga, a primera hora de la mañana.

El trabajo para garantizar el alimento a los pandas rojos de BIOPARC Fuengirola no acaba aquí. El equipo de Zoología debe que cuidar este bambú tan preciado y garantizar su correcta conservación. Para ello, es refrigerado en una cámara frigorífica con una pulverización fina de agua cada hora, asegurando que la planta permanece fresca durante dos semanas hasta la llegada del próximo envío.

El bambú es una rica fuente de fibra para los pandas rojos y contiene algunas proteínas, vitaminas y minerales esenciales. Además, también les proporciona un alto contenido de agua que les ayuda a mantenerse hidratados en su entorno natural. El alto contenido en fibra del bambú hace que sea muy bajo en energía que los pandas compensan con un nivel metabólico mas bajo de lo habitual en otros carnívoros.

En los últimos 50 años la población del panda rojo ha disminuido un 40% ¿El principal motivo? La deforestación y destrucción de su hábitat

Los pandas rojos son animales únicos y singulares que, desafortunadamente, están en peligro de extinción. Habitan en libertad en zonas localizadas de Nepal, China, Myanmar, India y Bután. La UICN estima que quedan menos de 10.000 pandas rojos en estado salvaje y que en los últimos cincuenta años su población ha disminuido un 40%.

Los pandas rojos sufren la destrucción de su hábitat natural. Este problema ha afectado a casi todos los animales vivos del planeta; pero debido a una tasa de natalidad genéticamente baja, esta especie está sufriendo más que otras. A pesar de que países como Nepal, China o Myanmar han aprobado leyes para su protección, la destrucción continúa.

La deforestación, la urbanización y la transformación de la tierra para la agricultura son sus mayores amenazas.

Bioparc Fuengirola alberga a esta especie desde 2006. Chang y Maggie se encuentran en la zona del dosel del bosque y comparte espacio y convive pacíficamente con el casuario común y la nutria de uñas cortas, un ejemplo del éxito de los recintos multiespecies, estos suponen un estímulo y un enriquecimiento para los animales y, además, ofrecen al visitante una imagen mucho más real de la naturaleza.

La dieta de bambú del panda rojo del BIOPARC de Fuengirola