Nuevos investigados en la Operación Jenner, hasta alcanzar 2.200 personas en la tercera fase. La mayoría son clientes de la trama que pagaban para ser inscritos de manera fraudulenta en el registro oficial de vacunados y, así, poder obtener el pasaporte Covid, el cual acredita la pauta de vacunación completa a pesar de no cumplir con los requisitos, según confirman fuentes policiales.
La tercera fase de la operación ha permitido detener a cuatro personas -intermediarios- e identificar a 600 presuntos clientes de la red, hasta alcanzar los 2.200 investigados. “El número puede seguir aumentando, porque estos son los que hemos detectado inscritos con las dos claves de acceso al sistema que detectamos en primer lugar, que se han utilizado fraudulentamente. Si se descubre que accedieron con otras claves, como sospechamos, el número puede aumentar de manera exponencial”, sostienen fuentes cercanas a la investigación.
La Policía Nacional ha identificado como presuntos implicados en un delito de falsedad documental y otro contra la salud pública a deportistas profesionales, modelos, cantantes, empresarios "muy conocidos", abogados de renombre y actores, como Verónica Echegui -ganadora de un premio Goya 2022- o Álex García.
La investigación comenzó a principios de año al detectarse la existencia de un grupo en Francia, que en mensajes de Telegram de negacionistas de la enfermedad ofertaban códigos QR fraudulentos de pasaportes Covid. Las indagaciones de la policía sobre la rama desembocaron en la detención de dos personas en España, una mujer en Sitges (Barcelona), encargada de cobrar a los clientes y un hombre en Madrid. Asimismo, se detectó la existencia de un segundo grupo más organizado, asentado en España y sin conexión con el anterior, sostienen fuentes cercanas a la investigación.
La segunda fase se desmanteló con la detención de seis personas, todas ellas en Madrid. No obstante, se identificó a 1.600 presuntos clientes, como el cantante Omar Montes, el cual negó su implicación en la trama.
La organización había creado dos tipos de redes de clientes. Los de la primera red tenían que pagar 200 euros a cambio de un certificado falso de prueba PCR con resultado negativo y los de la segunda, con mayor poder económico, se les pedía 1.000 euros por incluir sus nombres en el registro de vacunación y, de esta manera, obtener el pasaporte Covid, según la investigación. Este procedimiento lo realizaba, presuntamente, una enfermera de un hospital de Madrid que, supuestamente, utilizaba sus claves y las de otro compañero para acceder al sistema informático de Sanidad y modificar los datos de vacunación de los clientes.
En agosto, el observatorio de una empresa israelí creía que había 2.500 grupos activos de Telegram en toda Europa, en los que se ofrecían certificados falsos, con una media de 100.000 seguidores por grupo y algunos superaban los 450.000 miembros. En España, el Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe) alertó en septiembre de que estaban detectando estafas de venta de documentos falsos.
