Madrid vive el Orgullo más reivindicativo tras la pandemia: "Pararemos el odio que ya está aquí"

Manifestaciín del Orgullo de Madrid 2022

Se manifestó la reivindicación de la necesidad de mejorar y aprobar la Ley Trans, además de impulsar el Pacto Social contra los discursos de odio

El orgullo volvió a las calles de Madrid después de dos años de pandemia, más reivindicativo que nunca, bajo el lema de  'Frente al odio: Visibilidad, Orgullo y Resiliencia'. Las calles de la capital madrileña se tiñeron de los colores de la bandera arcoíris con una gran asistencia de entre 600.000 y 700.000 personas según la Delegación del Gobierno, y de un millón y medio, según los organizadores.

El desfile comenzó a las 19:05 frente a la estación de Atocha, en la glorieta Carlos V, finalizando en la Plaza de Colón por todo lo alto, con la lectura del manifiesto, pregón y otras actividades en el escenario. Las principales reivindicaciones de este orgullo se centraron en aprobar el Proyecto de Ley Trans y LGTBI, además de impulsar el Pacto Social y de Estado contra los discursos de odio.

La marcha fue encabezada por activistas LGTBI+ y representantes de diferentes sectores de la sociedad, seguidos por numerosas entidades LGTBI+ de todo el país. Por último, las carrozas acaparaban las miradas de la gente, aportando el toque más festivo a un día bastante reivindicativo por línea general. 

En la lectura del manifiesto, el colectivo advirtió de que parará "el odio que ya está aquí" dirigido hacia los grupos más vulnerables que "pretende envenenar a toda la sociedad" y seguirá luchando por la libertad y la igualdad. 

"Gritan ya desde las instituciones terribles discursos de odio: nos estigmatizan, señalan, nos culpan de problemas reales e inventados, nos presentan como personas con privilegios o peor, como amenazas a menores, o a las mujeres. Nos quieren señalados, culpables, con rabia, con miedo y con odio", alerta el manifiesto. Por ello, los portavoces han revelado que conocen la estrategia, la van a combatir, y "jamás" tendrán como enemigos a las "personas migrantes, las mujeres, las feministas, las personas gitanas o musulmanas".