Con tan solo unas horas de vida, ya es conocida en toda Galicia. Mara es una bebé que decidió conocer por fin a sus padres, durante la madrugada del sábado en Noia (A Coruña). Lo impresionante de su historia es que nació en su casa, solamente con la tranquilidad que pudo soportar su madre y la ayuda que pudo dar su padre, a través de las instrucciones que iba dándoles la matrona por una videollamada.
Tan solo tuvieron unos minutos antes, la ayuda de Ana, Nerea, Telva y Carlos, unas enfermeras y técnicos de ambulancia. Los padres ya contaban con algo de experiencia, ya que Mara es su segunda hija. Por eso, supieron que podría ser un parto rápido y sin riesgo, lo que no esperaron es que fuese de manera tan inesperada.
Alicia cuenta que, esa misma noche, ya de madrugada a las 7:30, notaba que la bolsa se estaba fisurando y se fue hacia el salón. Minutos más tarde, su primera hija le pidió el pecho, lo que hizo que se liberasen unas sustancias que pueden influir en el parto. Cuando ya casi estaban a punto de salir hacia el hospital, porque los dolores habían aumentado demasiado rápido, Alicia se puso de parto y no pudieron hacer el viaje.
Alex quiso llamar una ambulancia para no tener que alargar la espera viajando en el coche. Pero, Alicia le tranquilizó hasta que finalmente no podía aguantar los calambres y tuvo que ponerse de parto en su propia casa. La ambulancia terminó llegando sobre las nueve de la mañana y a las 9:22 de la mañana ya había nacido la niña.
El padre reconoce haber sentido muchos nervios por si algo se complicaba durante el parto. Además, agradece la asistencia de los sanitarios presentes durante el parto y les ha calificado como "padrinos de la niña". Ambos destacan el importante papel que desempeñó su matrona por videollamada, a la hora de darles instrucciones y conseguir que los dos se relajasen por momentos.
