2 millones de litros de vino tinto desbordan las calles de un pueblo en Portugal

Vino tinto inundando las calles de un pueblo en Portugal

Dos depósitos de vino tinto reventaron en una destilería en Portugal inundando las calles con 2,2 millones de litros de esta bebida

El vino inundó las calles y cubrió los coches que estaban aparcados

Los vecinos de Sao Lourenço do Bairro, una localidad situada en el centro de Portugal, se quedaron atónitos cuando, como si de un milagro se tratase, las calles de su pueblo se inundaban de vino tinto. Una imagen espectacular causada por un accidente en una destilería, donde se derramaron unos 2,2 millones de litros de vino.

El vino se tinto se desbordó por las calles del tranquilo pueblo, creando un contraste impresionante con el asfalto. El vídeo del suceso muestra cómo las olas de vino tinto rodean señales de tráfico y cubren los coches aparcados. El vino tinto llegó a tal punto, que hasta entraron en el sótano de una casa cercana antes de dirigirse hacia los campos adyacentes.

La autoridades investigan el incidente

Al principio, se temió que el río próximo pudiera verse afectado por esta singular riada, pero las autoridades locales actuaron con rapidez para evitar cualquier impacto negativo en el medio ambiente, según reportó el medio The Telegraph.

La bodega implicada, Levira, emitió un comunicado en el que pidió perdón por los perjuicios y asumió toda la responsabilidad del accidente inusual. “Las causas de este incidente están siendo investigadas por las autoridades competentes. Estamos totalmente comprometidos a cubrir los costos asociados con la limpieza y reparación de los daños, y contamos con equipos listos para intervenir de inmediato. Nuestra prioridad es resolver esta situación lo más rápido posible”, afirmó la empresa.

El "Milagro de Settecani" 

Este sorprendente suceso ha recordado a otro extraño suceso que ocurrió hace tres años en Settecani, Italia, donde los habitantes se sorprendieron al ver que, en lugar de agua, salía vino tinto de sus grifos. Este desconcertante fenómeno tuvo lugar en la región norte de Emilia-Romaña.

La bodega local, Cantina Settecani, estaba conectada a la red pública de agua, pero un fallo en una válvula durante trabajos de mantenimiento hizo que el Lambrusco espumoso empezara a fluir en sentido contrario. Luisa Malaguti, representante de la empresa, recordó el incidente: “Nuestro personal intervino con prontitud, para decepción de algunos lugareños que habían comenzado a embotellar el vino”.