jueves. 02.05.2024

En pequeñas localidades de Italia, los recientes gestos del Papa Francisco para acoger a las personas transexuales en la Iglesia resuenan especialmente, generando impacto en la clase trabajadora. En Torvaianica, un pueblo en la Ciudad Metropolitana de Roma, una comunidad de mujeres trans ha encontrado apoyo y esperanza gracias a la relación de amistad con el pontífice, mediada por su párroco local. Este paso refleja una inclinación hacia la inclusión de un colectivo históricamente marginado y discriminado.

El Dicasterio para la Doctrina de la Fe del Vaticano ha señalado que las personas transexuales y homosexuales pueden desempeñar roles de padrinos o madrinas en el bautismo "en determinadas condiciones", siempre que no exista un "riesgo de escándalo" o "desorientación" en la comunidad eclesial.

La pregunta sobre si un transexual puede ser padrino o madrina en el bautismo tiene respuesta afirmativa, según el Vaticano, bajo ciertas condiciones. Se permite la participación de un adulto transexual que haya pasado por un tratamiento hormonal y una cirugía de reasignación de sexo, marcando un cambio en la perspectiva de la Iglesia hacia la inclusión de personas trans en roles importantes dentro de la comunidad eclesiástica.

Mujeres transexuales de Roma estrechan lazos con el Papa Francisco