Los medicamentos para retrasar el parto prematuro son seguros para la reducción de la muerte neonatal, según un estudio

Archivo - Esta afección, que afecta alrededor del 13% de las mujeres en edad reproductiva, es la patología endocrinológica más común en las mujeres en todo el mundo. - VITHAS - Archivo

Investigadores de la Universidad de Birmingham (Reino Unido) han concluido que los medicamentos para retrasar el parto prematuro son "seguros" para la reducción global de la muerte neonatal, por lo que sugieren que "las mujeres de todo el mundo deberían poder acceder a los mismos".

Este nuevo artículo, publicado en la revista 'Cochrane Reviews', examina los datos de 122 ensayos clínicos para crear una tabla clasificatoria de los fármacos que retrasan el nacimiento, llamados tocolíticos, sobre su eficacia y efectos secundarios.

En concreto, los investigadores de la Universidad de Birmingham y de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revisaron 122 ensayos aleatorios, publicados entre 1966 y 2021, en los que participaron 13.697 mujeres y que se llevaron a cabo en 39 países, entre los que se encontraban Estados de renta alta, media y baja.

Las mujeres se beneficiaron de todos los tratamientos contra el retraso prematuro incluidos en el metaanálisis de los estudios, aunque el equipo de investigación señaló que la eficacia de los distintos fármacos era menos clara en algunos de los estudios considerados. El equipo también examinó los efectos secundarios de los distintos fármacos y combinaciones, incluida la probabilidad de tener que interrumpir el tratamiento.

Así, han reunido las pruebas sobre los beneficios y los daños de estos tratamientos (en comparación con la ausencia de tratamiento o el placebo), para dotar a los médicos y a los responsables políticos de todo el mundo de la información necesaria para decidir el mejor tratamiento para las mujeres a su cargo en su entorno específico.

"Los resultados muestran que los beneficios de estos fármacos superan los riesgos asociados a los efectos secundarios no deseados", afirma la doctora Amie Wilson, investigadora de Salud Materna Global de la Universidad de Birmingham.

"Estos tratamientos están conduciendo a una reducción significativa del número de nacimientos prematuros mortales, y ahora necesitamos comprender mejor la eficacia de los tocolíticos para grupos específicos en función de la duración del embarazo", ha añadido.

"Nuestra investigación anterior ha conducido a la mejora de las directrices para el uso de fármacos tocolíticos para retrasar el parto prematuro en el Reino Unido. Sabiendo que este trabajo ha contribuido a informar las próximas recomendaciones de la OMS sobre el uso de tocolíticos, esperamos que muchas más mujeres de todo el mundo tengan acceso a estos fármacos y tengan partos más saludables", ha reocrdado Wilson.

Por su parte, la doctora Victoria Hodgetts Morton, profesora clínica de obstetricia del NIHR en la Universidad de Birmingham y coautora del trabajo, ha recordado que el parto prematuro es la razón más común por la que un recién nacido puede morir, y la principal causa de muerte en niños menores de cinco años.

"El objetivo de los tocolíticos es retrasar el parto prematuro y dar tiempo a que las mujeres reciban medicamentos que pueden ayudar a la respiración y la alimentación del bebé si nace prematuro, y medicamentos que reducen la posibilidad de parálisis cerebral del bebé. Lo más importante es que un breve retraso del parto prematuro puede permitir a las mujeres recibir atención especializada", ha concluido.