Recomendaciones sobre la medicación antes de viajar

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Se debe llevar un botiquín básico con analgésicos, antisépticos, o repelentes, entre otros productos, y tener en cuenta las medidas de conservación de los medicamentos

La Junta de Andalucía, a través de la Consejería de Salud y Consumo y en colaboración con la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, recuerda a las personas que toman medicación habitual la importancia de seguir ciertas pautas antes de emprender un viaje, ya sea dentro o fuera del país.

Antes de viajar, es fundamental asegurarse de llevar suficiente medicación y considerar posibles imprevistos. Si el desplazamiento es al extranjero, se recomienda llevar copia de la receta o informe médico correspondiente y cumplir con las condiciones de conservación indicadas en el envase de cada medicamento.

Para viajes en avión, los medicamentos deben transportarse en el equipaje de mano en sus envases originales, evitando el uso de pastilleros. En el caso de desplazamientos en coche, es importante no dejar los medicamentos en el interior durante períodos calurosos para evitar alteraciones en su composición.

Asimismo, se deben tener en cuenta las condiciones de conservación de productos sanitarios como las tiras reactivas de glucemia, siguiendo siempre las indicaciones del fabricante.

Junto a la medicación habitual, se recomienda llevar un botiquín básico que incluya elementos esenciales para pequeñas emergencias. Entre ellos, antisépticos como agua oxigenada, alcohol o clorhexidina, vendas, gasas, esparadrapo o tiritas, así como antiinflamatorios y analgésicos, preferiblemente en formato gel para golpes. También es útil un termómetro para detectar posibles fiebre o estados febriles.

En zonas o países con garantías sanitarias limitadas, es aconsejable incluir en el botiquín antidiarreicos y suero para prevenir la deshidratación. Además, en verano, dado el aumento de exposición al sol, se recomienda portar protección solar con un alto factor de protección, protección labial y gafas de sol.

Para prevenir picaduras, es importante llevar repelentes de insectos autorizados y aplicarlos con frecuencia. En caso de picaduras dolorosas o molestas, se aconseja disponer de medicamentos antihistamínicos de uso tópico.