El ‘papamóvil’ de Francisco se convierte en hospital móvil para niños en Gaza
La organización humanitaria Cáritas Internacional, con el respaldo del propio papa Francisco en los últimos años de su vida, ha transformado el antiguo papamóvil que usó el pontífice en una clínica pediátrica móvil destinada a atender a niños en Gaza. La iniciativa, impulsada por Cáritas Suecia, permitirá ofrecer asistencia médica a hasta 200 menores al día en una de las zonas más castigadas por el conflicto.
El vehículo, originalmente un Mitsubishi pick-up, fue adaptado como papamóvil durante la visita de Francisco a Belén, un gesto que llegó de manos del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas. Ahora, tras su remodelación, la parte trasera ha sido equipada con instalaciones médicas completas para prestar atención sanitaria inmediata en territorio gazatí.
Un proyecto con el sello personal del papa Francisco
Francisco mantuvo una estrecha comunicación con las comunidades cristianas de Gaza, a las que —según fuentes oficiales— llamaba cada noche durante el prolongado asedio de los últimos dos años. El pontífice pidió repetidamente el fin de la guerra, la liberación de todos los rehenes y el levantamiento del bloqueo humanitario impuesto por Israel.
“El vehículo es un símbolo de que los niños de Gaza no están olvidados”, declaró el cardenal Anders Arborelius, de Estocolmo, quien presentó la propuesta al papa antes de su fallecimiento.
Su entrada en Gaza, aún en el aire
La implementación del proyecto depende ahora de que las autoridades israelíes permitan el acceso del vehículo al enclave palestino. Aunque la retirada escalonada del Ejército israelí y la liberación de los últimos rehenes se han completado, el alto el fuego continúa sin consolidarse. Consultadas sobre si autorizarán la entrada de la clínica móvil, las autoridades israelíes han preferido no pronunciarse.
El representante de los franciscanos ante el Estado de Palestina, padre Ibrahim Faltas, recordó el profundo cariño del pontífice por Tierra Santa: “Sabemos cuánto amaba el papa Francisco a los pueblos de Belén y, especialmente, a los habitantes de Gaza”.