sábado. 20.04.2024

El F.C Barcelona llegaba al Ciutat de València con algunos cambios en el once respecto al partido de ida contra el Eintrach, con Dembelé y Frenkie de Jong como titulares, para no sufrir en la creación ofensiva y creatividad arriba como contra los alemanes, de la misma manera que el Levante, decidió plantar un juego similar a los alemanes, compactos en defensa para luego salir a las contras rapidísimos con Morales y Roger.

En los primeros 45 minutos de encuentro podemos acordar que no ocurrió nada de gran interés, algunos ataques inofensivos por ambos equipos, que parecían haber firmado una especie de tregua antes de saltar al campo. Todo lo contrario a unos históricos 45 minutos que se dieron en la segunda parte del encuentro.

El partido se comenzó a poner emocionante con la salida de Pedri y Gavi, con mayor electricidad que la dupla de Nico y De Jong, los cuales no crearon nada de peligro en la primera parte, a una defensa tan bien estructurada como la del Eintrach. Mientras tanto el Levante, que había creado más peligro que el Barcelona, consiguió lo que se pensaba imposible, provocó un penalti del Barcelona. El primero después de un año sin que le pitaran un penalti en contra. Dani Alves cometió el error en una infracción totalmente evitable. Morales que ya había dado avisos anteriores con su gran calidad ponía el 1-0 en el marcador.

Pero esto no quedó ahí, pues el Levante continuó atacando a un F.C Barcelona algo adormilado por el primer golpe de los granotas que seguían defendiendo muy bien. No habían pitado ni un solo penalti en contra al Barcelona en toda la temporada, pues ayer cometió dos. En este caso fue Roger quien lo tiraría, pero Ter Stegen comenzó con el despertar del Barcelona parando el lanzamiento y evitando el 2-0 del Levante. 

El penalti fallado del Levante sirvió de despertador a los de Xavi que comenzaron a jugar de manera más rápida y menos previsible. En una buena jugada de elaboración que nació de los pies del tinerfeño Pedri, Dembelé lanzó al área un centro milimetrado a la cabeza de Aubameyang que con un buen cabezazo empató el partido para tranquilidad de Xavi. Una asistencia más del extremo francés que ya se sitúa como mayor asistente de la liga empatado con Karim Benzema.

El partido se había vuelto loco, el Levante no quería conformarse con el empate, quería hacer sangrar al Barcelona, pero cuando atacas abres más espacios, espacios que aprovecharían Pedri y Gavi, para con una combinación preciosa entre ambos remontar un encuentro que con los penaltis se les había puesto cuesta arriba. Volvía a marcar Pedri una vez más, en una faceta más ofensiva algo habitual desde la llegada de Xavi, un Xavi que celebró con rabia el gol de la remontada, pero que aun sufriría más en el encuentro.

El Barcelona no sentenciaba, dejaba el marcador por la mínima, abierto a un nievo posible empate, el Levante estaba esperando su oportunidad aprovechando los espacios que el Barcelona dejaba al subir al ataque. Y así fue como en una de las muchas contras del partido, la inoperancia de Lenglet decía "no hay dos sin tres", y cometía un tercer penalti a favor de los granotas. El central francés había entrado desde el banquillo al campo y lo más destacable que hizo fue cometer ese error.

Melero a diferencia de su compañero Roger no perdonó y puso el empate en el marcador. Un 2-2 con el que el levantinismo soñaba, ya que era un punto muy codiciado en su lucha por la salvación. Pero para salvación la que estaba a punto de llegar para el Barcelona en los últimos instantes. El Barcelona comenzó a meter centros a la desesperada acumulando hombres en el área granota, un área donde se encontraba el salvador, experto en los últimos minutos, Luuk de Jong.

Jordi Alba, tan buen lateral como extremo, puso con música un centro al área a la desesperada en el minuto 92 de encuentro, cuando ya el Levante soñaba con el empate, cuando por los aires, apareció, luchando con toda su alma, Luuk de Jong, que con un gran cabezazo, con más ímpetu y empuje que calidad, le daba la victoria en el descuento a la Xavineta que veía como su victoria se les escapaba entre los dedos.

Así, el F.C Barcelona se aferra y afianza aún más al segundo puesto de la competición tras el pinchazo del Atlético de Madrid ante otro de los equipos en la lucha por la permanencia, el Mallorca. Ahora el Barcelona recibirá en casa al Eintrach de Frankfurt, en un partido crucial para la temporada de los culés, que tendrá que remar para pasar a las semifinales de la Europa League.

Luuk de Jong al rescate de un Barça a la deriva