Ángel Torres, un joven snowboarder pontevedrés, ha demostrado un increíble espíritu de superación tras un drástico cambio en su vida. Hace apenas un año, este apasionado del deporte sufrió la pérdida de una pierna mientras trabajaba como buzo profesional. A pesar de este revés, decidió no dejar que eso le impidiera seguir haciendo lo que más le apasiona.
Después de recibir una prótesis en octubre del mismo año, Ángel se propuso aprender a caminar de nuevo. Pero su determinación no se detuvo ahí; al día siguiente de recibir la prótesis, ya estaba montando en skate. Sus amigos y familiares no tardaron en reconocer su fuerza de voluntad, prediciendo incluso que podría convertirse en un atleta olímpico.
Este pronóstico no estaba lejos de la realidad. Ángel pronto recibió una oferta para unirse al equipo español de Promesas Paralímpicas de snowboard. Lo que comenzó como un simple hobby se convirtió en una pasión que lo llevó a entrenar en los Alpes durante los meses sin nieve en España y en los Pirineos cuando sí hay nieve.
Su dedicación y esfuerzo dieron sus frutos rápidamente, logrando el segundo puesto en la Copa de España y el sexto en la Copa de Europa en su primera temporada como competidor. Sin embargo, Ángel enfrenta desafíos adicionales debido a su prótesis, diseñada principalmente para caminar y no para practicar deportes.
Con el objetivo de obtener una prótesis adecuada para sus actividades deportivas y poder competir en igualdad de condiciones, Ángel ha lanzado una campaña de crowdfunding. A través de esta iniciativa, busca recaudar fondos para financiar la prótesis que le permitirá seguir persiguiendo su sueño: competir en los Juegos Olímpicos de Invierno de Milano Cortina en 2026.
Agradecido por el apoyo recibido hasta ahora, Ángel se ha convertido en un ejemplo de fuerza y resiliencia, demostrando que con determinación y pasión, no hay límites para lo que se puede lograr, incluso después de enfrentar adversidades.
