miércoles. 24.04.2024

El vuelo estaba programado tiempo atrás y en él sólo debían viajar el piloto y un tripulante encargado de la cámara de vigilancia. En las pruebas que se le hiceron tras el accidente se comprobó que el piloto había consumido cocaína y metanfetaminas. La DGT ha abierto una investigación sobre lo ocurrido para examinar la forma de proceder del piloto

El piloto había consumido cocaína y metanfetaminas y además en el helicóptero de la DGT accidentado viajaba una persona más de la permitida.

Poco a poco se saben más detalles sobre lo ocurrido el pasado domingo en la localidad madrileña de Robledo de Chavela cuando un helicóptero de la Dirección General de Tráfico (DGT) tuvo un accidente en el que resultaron heridas dos personas.

Según han podido saber las agencias viajaban tres personas cuando ese vuelo sólo estaba previsto para el piloto y otro funcionario de Tráfico.

El vuelo estaba programado tiempo atrás y en él sólo debían viajar el piloto, que dio positivo en cocaína y anfetaminas después del siniestro, y un tripulante encargado de la cámara de vigilancia que porta la aeronave.

Por su parte, fuentes de la Dirección General de Tráfico han indicado a EFE que se ha abierto una "información reservada" interna para examinar la forma de proceder del piloto, que fue detenido por la Guardia Civil acusado de un delito contra la seguridad aérea. Se trata, según explican las fuentes, de un paso previo a la apertura de un expediente disciplinario, toda vez que la investigación sobre las causas concretas del siniestro continúa abierta.

La DGT tacha de "reprobables" este tipo de "malas praxis" entre sus trabajadores y, en caso de esclarecerse la responsabilidad del piloto en el suceso, tomarán las medidas oportunas.

El helicóptero accidentado es un Eurocopter AS355 N Ecureuil 2, una aeronave valorada en unos tres millones de euros y que en España operan las policías autonómicas, Tráfico y los agentes forestales.

El helicóptero de la DGT que se estrelló viajaba con una persona de más