El ayuntamiento de Santiago de Compostela ha creado un sistema de siete radares informativos que dan las gracias a los conductores cuando cumplen los límites de velocidad y les avisa cuando los rebasan, en el caso de que lo hagan. Gonzalo Muiños, el encargado de la concejalía de Movilidad de Santiago de Compostela, confirma que "hemos comprobado, gracias a esto, que el 85% de los conductores que circulan por la ciudad, lo hace bien".
Esta especie de radares se han colocado en las zonas en las que se registraban más accidentes, en zonas próximas a escuelas o en los accesos a la ciudad. El propio concejal ha constatado que "no solo han disminuido la velocidad, si no que nos hemos dado cuenta de que sin multar el ciudadano también cumple".
Estos radares funcionan de la siguiente forma, cuando un conductor supera el límite máximo permitido, es avisado con un rótulo rojo y un dibujo de precaución. Funcionan mediante un sistema de placas solares pequeños que permiten que se puedan transportar en caso de querer cambiarlos de localización.
Con este nuevo método se prueba a la población que las multas no siempre son la única vía y, tras el éxito cosechado con esta nueva propuesta, está previsto colocar más radares de este tipo por toda la ciudad.
