Kostya, de seis años, ha sufrido un cáncer óseo y ha estado en una guerra. Hace unas semanas, su día a día consistía en bajar con la ayuda de su padre y sus muletas de colores a un refugio en Leópolis. No obstante, sus padres ya han llegado a España después de huir de Ucrania gracias al médico del pequeño. "Está en buenas manos", dice Anton, su padre.
Kostya estuvo en tratamiento en Pamplona por un grave sarcoma. La quimioterapia comenzó en abril de 2021 y la operación quirúrgica llegó ese mismo verano. Después hubo un seguimiento hasta el 14 de febrero de este año, 10 días más tarde empezó la invasión rusa a Ucrania.
Al ver las imágenes de la guerra, José Lamo de Espinosa, el doctor que lo trató, no descansó hasta sacarlos del país. "La relación que tenemos ya es mucho más de la que pueda tener un médico con un paciente", explica.
"Vivimos el momento de la frontera prácticamente minuto a minuto", continúa José para recalcar que fueron momentos de mucha tensión.
Pese a lo duro del viaje de más de 2.000 kilómetros, hubo momentos buenos. "Pararon en una estación de servicio en Lion y unos españoles reconocieron a Kostya", cuenta el médico. Espinosa asegura que quedan muchos niños "por salir de Ucrania".
