El alto al fuego de Putin durante la Navidad Ortodoxa no ha dado frutos en el cese de hostilidades entre ambos bandos de la Guerra de Ucrania. Las tropas ucranianas han denunciado diferentes ataques realizados por las fuerzas rusas, durante las 36 horas de tregua que Rusia asegura haber llevado a cabo, mientras que se daban numerosos ataques en diferentes zonas del país ucraniano.
Las autoridades de Kiev han tildado dicha supuesta tregua como una "maniobra" para que las tropas rusas ataquen sin recibir consecuencias Ucrania, más concretamente las zonas de Zaporiyia, Lugansk y Sumi. En esta última se han registrado al menos 39 nuevos bombardeos en edificios residenciales que, dejaron al menos 7 heridos y 1 fallecido.
En esta misma línea, en Zaporiyia se ha producido una fuerte explosión junto a una estación de tren de la localidad, mientras que en Lugansk se han registrado, según Kiev, numerosos disparos y asaltos a municipios de la región. "No os creáis ni una sola palabra de los ocupantes. Si es posible, evitad acudir a las iglesias en zonas en las que hay bombardeos, porque los ocupantes usarán a la gente como objetivo de ataques terroristas", ha asegurado la viceministra ucraniana Iryna Vereshchuk.
Por su parte, Rusia asegura haber cumplido con el alto el fuego, es más, acusan a Ucrania de ser los verdaderos perpetradores de ataques y continuar sus operaciones militares. "Las fuerzas rusas han estado cumpliendo el alto el fuego a lo largo de toda la línea de contacto", ha subrayado en una rueda de prensa el actual portavoz del Ejército ruso, el general Igor Konashenkov, quien ha asegurado que Moscú seguirá "aplicando el alto al fuego" en vigor hasta la próxima medianoche.
