Advierten que enfoques extremistas afectan la regulación de productos de nicotina
Las posiciones extremas en torno a la regulación de los productos que contienen nicotina están generando normativas poco eficaces y, en ocasiones, efectos opuestos a los deseados en materia de salud pública. Así lo han subrayado varios investigadores y especialistas en control del tabaquismo durante la celebración de la Cumbre del Cigarrillo Electrónico que se desarrolla en el Real Colegio de Médicos de Londres.
Expertos de distintas instituciones universitarias y de salud pública han alertado sobre el impacto negativo que una visión polarizada está generando en las políticas regulatorias. Según han indicado, el desconocimiento científico y la falta de consenso dificultan la creación de marcos normativos eficaces, con el riesgo de perder de vista los mejores resultados posibles en protección de la salud.
Entre los casos expuestos, destaca el estudio presentado por una investigadora de la Universidad de Yale, en Estados Unidos, que recoge el aumento del consumo de cigarrillos tras la prohibición de sabores en los vapeadores. Esta tendencia fue avalada por otra investigación realizada en Países Bajos, que asocia dicha prohibición al incremento del tabaquismo, incluso entre personas que no habían fumado con anterioridad. En concreto, uno de cada diez usuarios que abandonaron el vapeo acabó iniciándose en el consumo de tabaco.
- Efectos de la regulación y posición de los expertos
- Análisis de las restricciones a los sabores
- Propuestas sobre exhibición y regulación de productos
- Experiencias internacionales y dificultades actuales
- La dimensión psicológica de la adicción
Efectos de la regulación y posición de los expertos
Los participantes en el panel "Nicotina, ciencia y regulación de tabaco" coincidieron en la necesidad de fundamentar la regulación de los productos de nicotina en la evidencia científica más rigurosa y actualizada. La recomendación pasa por analizar con detenimiento los resultados de políticas previas para encontrar un equilibrio entre la protección de los menores y la reducción del daño en la población fumadora. Entre las voces destacadas, Lion Shahab, profesor de psicología clínica en el University College London, remarcó que la "mala y politizada ciencia lleva a regulaciones pobres". Señaló que la ausencia de regulación puede desembocar en un aumento del consumo de productos con nicotina, mientras que la sobre-regulación fomenta el acceso al mercado ilícito.
Shahab también explicó la diferencia entre la nicotina y la cafeína, rechazando cualquier equiparación entre ambas y señalando que existe una relación directa entre el consumo de nicotina y problemas de salud mental. Además, advirtió que el uso regular de nicotina facilita la incorporación de nuevos usuarios a este hábito, incluidos los que antes no fumaban.
Análisis de las restricciones a los sabores
La profesora Abigail Friedman, del Departamento de Regulación de Salud de la Universidad de Yale, presentó un análisis donde se observa que las limitaciones a los sabores en productos de vapeo, implementadas en varios estados de Estados Unidos, han resultado en un descenso del vapeo tanto en jóvenes como en adultos jóvenes. Sin embargo, advirtió que estas restricciones han propiciado un aumento en el consumo de cigarrillos en estos mismos grupos, particularmente entre quienes no contaban con formación universitaria. Los estudios de la Universidad de Yale han concluido que cuando uno de estos productos es más caro o menos accesible, existe una mayor propensión a que los consumidores se desplacen hacia la otra alternativa, en este caso, el cigarrillo.
Friedman mencionó además el caso de Maryland, donde se priorizó la reducción de dispositivos desechables con sabores, lo que derivó en una bajada del vapeo entre adultos jóvenes sin aumentos significativos en el tabaquismo. En consecuencia, su equipo trabaja en la propuesta de prohibir sabores especialmente en productos desechables, manteniendo opciones como el mentol para evitar efectos adversos y minimizar el impacto ambiental asociado a estos dispositivos de un solo uso.
Propuestas sobre exhibición y regulación de productos
En cuanto a la exposición de los productos, Friedman subrayó la experiencia de Reino Unido al prohibir la exhibición de tabaco y derivados con nicotina en escaparates y estanterías de tiendas accesibles a menores. Consideró que esta medida cierra posibles lagunas regulatorias para productos futuros que contengan nicotina, reduciendo la exposición accidental y sentando las bases para futuras licencias y controles específicos.
Experiencias internacionales y dificultades actuales
Durante el encuentro, Hayden McRobbie, del Instituto Wolfson de Salud Pública de la Universidad Queen Mary de Londres, señaló que el actual debate científico y la confrontación pública entre asociaciones y expertos pueden aumentar la confusión entre la población. Este fenómeno, de acuerdo con McRobbie, termina dificultando la aceptación de políticas de salud pública y propiciando que los fumadores no diferencien las alternativas menos dañinas, como el cigarrillo electrónico, del tradicional consumo de tabaco.
Por su parte, Karl Lund, investigador senior del Instituto Noruego de Salud Pública, contextualizó el contexto actual recordando que, históricamente, ningún producto de nicotina ha abandonado el mercado sin ser reemplazado por otro. Lund hizo referencia a distintos productos, desde el tabaco para masticar hasta el snus oral, presentes principalmente en Suecia, que han ayudado a reducir el consumo de cigarrillos entre fumadores severos. Según subrayó, la literatura científica indica escasa relación entre el uso de snus y el incremento de enfermedades asociadas al tabaquismo, aunque advirtió sobre la dificultad actual de distinguir efectos de salud específicos debido al poliuso o consumo simultáneo de varios productos. La investigación sobre bolsas de nicotina continúa en desarrollo y se esperan resultados más claros en el próximo año.
La dimensión psicológica de la adicción
El panel concluyó con la intervención del profesor emérito Robert West, del University College London, quien manifestó que la dimensión psicológica de la adicción al tabaco supera generalmente a la física. West atribuyó las recaídas frecuentes entre fumadores a factores emocionales que no se compensan completamente con productos de sustitución.
West propuso la necesidad de mejorar la comprensión ciudadana acerca de los daños asociados a cada producto e insistió en la conveniencia de no equipararlos indiscriminadamente. Subrayó la importancia de desarrollar estrategias que favorezcan el abandono de los productos más lesivos y promuevan alternativas menos perjudiciales. Asimismo, destacó que el fomento de conductas alternativas y positivas que satisfagan los deseos del consumidor puede ser clave para erradicar la adicción, proporcionando no solo apoyo y tratamiento, sino también fortaleciendo la resiliencia mental frente al tabaquismo y la dependencia de la nicotina.
