viernes. 29.03.2024

Un equipo de investigadores alemanes ha presentado el caso de un paciente seropositivo de 51 años cuya úlcera en la comisura de la boca se produjo como primer signo de infección por el virus de la viruela del mono.

La infección por el virus de la viruela del mono puede presentarse inicialmente con muy pocos síntomas clínicos pronunciados y sin signos de infección, y sólo pueden ser visibles unas pocas vesículas cutáneas.

Según este trabajo, publicado en la revista científica 'Deutsches Ärzteblatt international', el paciente acudió a su médico de cabecera con una vesícula en la comisura de la boca izquierda que había aparecido el día anterior.

No presentaba signos clínicos de infección; su infección por VIH estaba bien controlada desde hacía años, tanto virológica como inmunológicamente, con terapia antirretroviral. Inicialmente, la úlcera del paciente se trató con una pomada tópica combinada.

"No tenía signos clínicos de infección; su infección por VIH estaba bien controlada desde hacía años, tanto virológica como inmunológicamente, con terapia antirretroviral", han explicado los autores, liderados por Stefan Schlabe, del Departamento de Medicina del Hospital Universitario de Bonn (Alemania).

A los pocos días, desarrolló una úlcera dolorosa en la comisura izquierda de la boca y volvió a acudir a su médico de cabecera. Se tomó una muestra de la úlcera. Las pruebas de reacción en cadena de la polimerasa (PCR) confirmaron el virus de la viruela del mono.

Posteriormente se observó un aumento de las vesículas de viruela del mono en la piel, pero también en el paladar. Debido a la creciente hinchazón de la base de la lengua y a la dificultad para hablar, se decidió hospitalizar al paciente para que recibiera tratamiento antiviral con tecovirimat.

El brote de viruela del mono sigue siendo una emergencia sanitaria mundial, que es el máximo nivel de alerta según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Hasta ahora se han registrado casi 80.000 casos en 106 países, con 36 muertes.