Durante el verano se disparan las posibilidades de sufrir una intoxicación debido al aumento drástico de las temperaturas. Hay que manipular bien los alimentos y saber cómo hacerlo para evitar sufrirla. Toma nota de los siguientes consejos.
Deberemos prestar especial atención en la higiene, lavar las hortalizas, verduras o frutas que vayamos a consumir. Asegurarnos de no consumir nada que haya pasado la fecha de caducidad o que no haya respetado la cadena adecuada del frío. Además, si viajamos habrá que tener en cuenta el agua que bebamos, pues muchas intoxicaciones vienen en consecuencia de microorganismos que se encuentran en el agua.
La relación entre las altas temperaturas y el aumento de las intoxicaciones tiene que ver con que ayuda a la proliferación de microorganismos y bacterias que ingeriremos sin darnos cuenta y nos la provocarán. Sin embargo, con las bajas temperaturas, es decir, manteniendo los alimentos en la nevera, es mucho más complicado que eso ocurra. Además, por eso es tan importante lavar bien los productos que vayamos a consumir y cocerlos o cocinarlos el tiempo justo y necesario.
De ahí que la OMS de una serie de pautas para intentar evitar las intoxicaciones. Pasa por la higiene de los productos, tanto a la hora de comprarlos como una vez en casa, consumir solo agua potable, incluida en forma de cubitos de hielo y evitar ingerir cualquier producto que su envase esté con forma extraña o deteriorado.
