Muchas de nosotras queremos maquillarnos de manera muy natural, que parezca que no vamos pintadas, o por lo menos que no vamos pintadas como una puerta. Para conseguir ese efecto de naturalidad los tintes de labios y mejillas son ideales.
Este revolucionario producto permite mantener tus labios pintados con una larga duración y un acabado profesional. Se debe a que es un cosmético hiperpigmentado a base de alcohol que se seca nada más echarlo, dejando sellado el color. Suele ser líquido o en textura gel.
Ahora con el uso de la mascarilla se han vuelto más populares, ya que los labios se mantienen a pesar de ello perfectamente pintados. También son fijos aunque bebamos o comamos, hacen magia.
Cómo aplicarlo
Para empezar, lo más importante es tener unos labios bien hidratados y exfoliados. Lo fundamental en la aplicación del tinte es la rapidez, ya que se seca bastante rápido.
Comenzamos si queremos resaltar labios pintando los contornos con un lápiz. Así, evitaremos salirnos al aplicar el tinte. Seguimos con ayuda del pincel a dar el tinte por toda la superficie de los labios y a esperar a que se seque. También existen algunos que se aplican y luego hay que retirar una capita que dejan, como las mascarillas peel-off.
El acabado es mate. Sin embargo, si queremos dar un poco de brilli-brilli a nuestros labios, solo tenemos que utilizar un brillo transparente encima.
Es importante tener en cuenta que al llevar alcohol el tinte reseca mucho los labios y si vamos a utilizarlo constantemente, deberíamos utilizar algún bálsamo reparador o mascarillas de labios para recuperar esa hidratación labial.
Para las mejillas debemos funciona igual. Aplicamos muy poco producto sobre ellas y extendemos lo máximo posible para que no queden muy marcadas.
Lo bueno de los tintes es que con un desmaquillante bifásico se quitan con facilidad, y sin ningún tipo de problemas. ¡Ya es hora de animarse a probarlo!
